Casa do Baile
La Casa do Baile, diseñada por Oscar Niemeyer para completar el conjunto arquitectónico de Pampulha con un espacio para el entretenimiento popular con restaurante y salón de baile, fue construida entre 1940 y 1943 sobre una pequeña isla artificial conectadas por un pequeño puente de hormigón en el paseo marítimo, encargándose Roberto Burle Marx del diseño paisajístico.
Niemeyer crea en la pequeña isla en la orilla del lago de Pampulha un volumen aparentemente circular cuya planta se desarrolla a partir de dos círculos que son tangentes internamente, del que se desarrolla una marquesina apoyada sobre columnas que delimita el entorno del jardín abierto, y finaliza en un pequeño edificio que alberga los baños, envolviendo delante de este un pequeño escenario circular para espectáculos al aire libre, rodeado por un lago en forma de ameba.
La marquesina, elemento principal del conjunto, es más que un mero abrigo para la lluvia o el sol. Extendiendo el espacio de vida más allá del interior de la sala circular, amplía la continuidad entre ese espacio, más formal, y el espacio exterior, la terraza cubierta y jardín. Es la marquesina que conforma la transición entre ambos, más larga y protegida en las puertas de entrada, más delgada y abierta en sus desarrollos curvilíneas cuya función principal es proporcionar un cierre, límite claro entre un lugar público y la laguna.
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