Diferencia entre revisiones de «Antigua Catedral de Santa María de Segovia»

m
Texto reemplazado: «}}↵↵» por «}} »
m (quita corchetes)
m (Texto reemplazado: «}}↵↵» por «}} »)
 
Línea 16: Línea 16:


{{Cita|"...por la grande antigüedad della (La Claustra) y por ser fecha de mampostería e non aver desvano en ella para que se pueda probeer en tiempo de las aguas, está hundida e mobida por muchas partes y está para ser venir al suelo".}}
{{Cita|"...por la grande antigüedad della (La Claustra) y por ser fecha de mampostería e non aver desvano en ella para que se pueda probeer en tiempo de las aguas, está hundida e mobida por muchas partes y está para ser venir al suelo".}}
A pesar de que la situación en la que se encontraba era lamentable, y que el obispo estableció ciertos impuestos para su reedificación, sus intentos no alcanzaron éxito alguno, y tuvo que esperar hundido y sin tejado hasta la llegada del obispo Juan Arias Dávila para llevarse a cabo las obras.
A pesar de que la situación en la que se encontraba era lamentable, y que el obispo estableció ciertos impuestos para su reedificación, sus intentos no alcanzaron éxito alguno, y tuvo que esperar hundido y sin tejado hasta la llegada del obispo Juan Arias Dávila para llevarse a cabo las obras.
En 1465 el nuevo obispo solicitó licencia al cabildo para construir el nuevo claustro, y se llamó a [[Juan Guas]] para que dirigiese las obras del mismo, y que, una vez finalizadas, llevaría a cabo las obras del nuevo palacio episcopal y otras construcciones segovianas, como la cabecera del Monasterio de Santa María del Parral, la [[bóveda]] de la [[Iglesia de San Miguel (Segovia)|iglesia de San Miguel]], la reedificación del Monasterio de Santa Cruz la Real o las del [[Monasterio de Santa María de El Paular]].
En 1465 el nuevo obispo solicitó licencia al cabildo para construir el nuevo claustro, y se llamó a [[Juan Guas]] para que dirigiese las obras del mismo, y que, una vez finalizadas, llevaría a cabo las obras del nuevo palacio episcopal y otras construcciones segovianas, como la cabecera del Monasterio de Santa María del Parral, la [[bóveda]] de la [[Iglesia de San Miguel (Segovia)|iglesia de San Miguel]], la reedificación del Monasterio de Santa Cruz la Real o las del [[Monasterio de Santa María de El Paular]].
Línea 30: Línea 29:


{{Cita|...mynan e contamynan en tal manera la yglesia que se espera dar con ella en tierra, de lo qual Dios Nuestro Señor es destruydo e su sacro templo profanado e la cibdad de ello nyngund provecho recibe antes mucho daño, e los dichos Deán e Cabildo mis partes e su yglesia son danyficados en quantía de más de cien myll ducados, porque allende del hedifiçio [hay] retablos, rexas, campanas, órganos, syllas del coro, e joyas de oro e plata e de seda, valen los dichos cien myll dicados, e más mayormente que ay escrituras que si se perdiesen el daño sería yreparable...}}
{{Cita|...mynan e contamynan en tal manera la yglesia que se espera dar con ella en tierra, de lo qual Dios Nuestro Señor es destruydo e su sacro templo profanado e la cibdad de ello nyngund provecho recibe antes mucho daño, e los dichos Deán e Cabildo mis partes e su yglesia son danyficados en quantía de más de cien myll ducados, porque allende del hedifiçio [hay] retablos, rexas, campanas, órganos, syllas del coro, e joyas de oro e plata e de seda, valen los dichos cien myll dicados, e más mayormente que ay escrituras que si se perdiesen el daño sería yreparable...}}
El Concejo accedió, pero dejó muy claro que lo fundamental era que los realistas ganasen la guerra, aunque ello supusiese la destrucción de la catedral. Los Comuneros consiguieron romper la capilla mayor, abriendo un portillo entre ésta y la de San Frutos, y encontraron a las fuerzas realistas trasladando las reliquias de [[Frutos (santo)|San Frutos]] y sus hermanos a la capilla del Alcázar. Se libró la lucha en las naves del templo, y las fuerzas realistas, para evitar que el destrozo fuera irreparable, se replegaron en el Alcázar, abandonando la torre y catedral, que fue sitiada por los Comuneros, quienes atacaron durante seis meses desde su nueva posición, hasta la triste derrota comunera en Villalar, con la que se puso fin al cerco del Alcázar. El canónigo Pantigoso redacta entonces un informe sobre el estado del templo:
El Concejo accedió, pero dejó muy claro que lo fundamental era que los realistas ganasen la guerra, aunque ello supusiese la destrucción de la catedral. Los Comuneros consiguieron romper la capilla mayor, abriendo un portillo entre ésta y la de San Frutos, y encontraron a las fuerzas realistas trasladando las reliquias de [[Frutos (santo)|San Frutos]] y sus hermanos a la capilla del Alcázar. Se libró la lucha en las naves del templo, y las fuerzas realistas, para evitar que el destrozo fuera irreparable, se replegaron en el Alcázar, abandonando la torre y catedral, que fue sitiada por los Comuneros, quienes atacaron durante seis meses desde su nueva posición, hasta la triste derrota comunera en Villalar, con la que se puso fin al cerco del Alcázar. El canónigo Pantigoso redacta entonces un informe sobre el estado del templo:


{{Cita|...aportillada por muchas partes, destechada y desolada, disipada y destruyda. Y los altares derrocados y profanados, los crucifixos e ymagenes de Nuestra Señora y de otros santos descaveçados, braços y piernas hechos pedaços. Los órganos grandes y los otros dos pares que estavan sobre el coro, quebrados y agujereados de escopetadas y otros tiros. Las sillas del coro trastornadas y evertidas de sus lugares, y muchas dellas quemadas, y otras quebradas puestas por defensas y albarradas. Y hecho dentro y alrrededor cavas, fosados, minas y contraminas, y por quitar las losas y laudes de la yglesia para hazer varreras y defensas, los huesos de los finados sacados y desenterrados, y hechas otras cosas semejantes. Las rejas de las capillas de la yglesia quytadas y puestas en las puertas y postigos cabe el Alcáçar para más los fortificar, quemada la casa del ospital y la del ospitalero, que estavan junto a la yglesia, donde se albergavan y acogían los pobres y hijos de Dios. Quemado y destruydo el refectorio... derrocada toda la librería o lo que della estava hecho de nuevo en sillería y cantería...|Mª Teresa Cortón de las Heras, La Construcción..., pág. 42.}}
{{Cita|...aportillada por muchas partes, destechada y desolada, disipada y destruyda. Y los altares derrocados y profanados, los crucifixos e ymagenes de Nuestra Señora y de otros santos descaveçados, braços y piernas hechos pedaços. Los órganos grandes y los otros dos pares que estavan sobre el coro, quebrados y agujereados de escopetadas y otros tiros. Las sillas del coro trastornadas y evertidas de sus lugares, y muchas dellas quemadas, y otras quebradas puestas por defensas y albarradas. Y hecho dentro y alrrededor cavas, fosados, minas y contraminas, y por quitar las losas y laudes de la yglesia para hazer varreras y defensas, los huesos de los finados sacados y desenterrados, y hechas otras cosas semejantes. Las rejas de las capillas de la yglesia quytadas y puestas en las puertas y postigos cabe el Alcáçar para más los fortificar, quemada la casa del ospital y la del ospitalero, que estavan junto a la yglesia, donde se albergavan y acogían los pobres y hijos de Dios. Quemado y destruydo el refectorio... derrocada toda la librería o lo que della estava hecho de nuevo en sillería y cantería...|Mª Teresa Cortón de las Heras, La Construcción..., pág. 42.}}
Concluían así cuatrocientos años de historia para la segunda catedral que tuvo la ciudad. A pesar del informe de ruina, el Deán y el Cabildo tomaron una vez terminada la contienda la catedral, que en 1553 todavía quedaba en pie gran parte de las capillas, así como en 1562 buena parte del edificio no se había hundido, como lo demuestra el dibujo de Anton Van der Wyngaerde.
Concluían así cuatrocientos años de historia para la segunda catedral que tuvo la ciudad. A pesar del informe de ruina, el Deán y el Cabildo tomaron una vez terminada la contienda la catedral, que en 1553 todavía quedaba en pie gran parte de las capillas, así como en 1562 buena parte del edificio no se había hundido, como lo demuestra el dibujo de Anton Van der Wyngaerde.


322 103

ediciones

Artículo procedente de Urbipedia.org. Con licencia Creative Commons CC-BY-NC-SA excepto donde se indica otro tipo de licencia.
Origen o autoría y licencia de imágenes accesible desde PDF, pulsando sobre cada imagen.
https://www.urbipedia.org/hoja/Especial:MobileDiff/689108