Diferencia entre revisiones de «Biblioteca de Alejandría»

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[[Archivo:2nd century Hebrew decalogue.jpg|300px|thumb|Fragmento de la [[Septuaginta|Biblia de los Setenta]], traducida del hebreo en Alejandría.]]
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La '''Biblioteca Real de Alejandría''' fue en su época la más grande del mundo. Situada en la ciudad [[Egipto|egipcia]] de [[Alejandría]], se cree que fue creada a comienzos del siglo III a. C. por Ptolomeo I Sóter y que llegó a albergar hasta 700.000 volúmenes. Una nueva '''Biblioteca de Alejandría''', promovida por la UNESCO, fue inaugurada en el año 2003 en la misma ciudad.
La '''Biblioteca Real de Alejandría''' fue en su época la más grande del mundo. Situada en la ciudad [[Egipto|egipcia]] de [[Alejandría]], se cree que fue creada a comienzos del siglo III a. C. por Ptolomeo I Sóter y que llegó a albergar hasta 700.000 volúmenes. Una nueva '''Biblioteca de Alejandría''', promovida por la UNESCO, fue inaugurada en el año 2003 en la misma ciudad.


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*Los filósofos eran todos los demás, ya que la Filosofía abarcaba las ramas del pensamiento y la ciencia: física, ingeniería, biología, medicina, astronomía, geografía, matemáticas, ingeniería, literatura, y lo que nosotros llamamos filosofía.  
*Los filósofos eran todos los demás, ya que la Filosofía abarcaba las ramas del pensamiento y la ciencia: física, ingeniería, biología, medicina, astronomía, geografía, matemáticas, ingeniería, literatura, y lo que nosotros llamamos filosofía.  
[[Archivo:Wasserschraube.JPG|260px|thumb|Tornillo hidráulico, aplicación de los estudios de Arquímedes.]]  
[[Archivo:Wasserschraube.JPG|260px|thumb|Tornillo hidráulico, aplicación de los estudios de Arquímedes.]]  
Entre ellos se encontraban personajes tan conocidos como Arquímedes, el más notable científico y matemático de la antigüedad; Euclides que desarrolló allí su [[Geometría euclídea|Geometría]]; Hiparco de Nicea, que explicó a todos la trigonometría‏‎, y defendió la visión [[Teoría geocéntrica|geocéntrica]] del universo; [[Aristarco de Samos|Aristarco]], que defendió todo lo contrario, es decir, el [[heliocentrismo|sistema heliocéntrico]] siglos antes de Copérnico; [[Eratóstenes de Cirene|Eratóstenes]], que escribió una geografía y compuso un mapa bastante exacto del mundo conocido; [[Herófilo de Calcedonia]], un fisiólogo que llegó a la conclusión de que la inteligencia no está en el corazón sino en el cerebro; los astrónomos Timócaris y Aristilo; [[Apolonio de Pérgamo]], gran matemático, que escribió en Alejandría ''Sobre las secciones cónicas'' ;[[Apolonio de Rodas]], autor de ''El viaje de los argonautas''; [[Herón de Alejandría]], un inventor de cajas de engranajes y también de unos aparatos movidos por vapor: es el autor de la obra ''Autómata'', la primera obra conocida sobre robots; el astrónomo y geógrafo Claudio Ptolomeo; Galeno, quien escribió bastantes obras sobre el arte de la curación y sobre anatomía. La última persona insigne del Museo fue una mujer, [[Hipatia de Alejandría]], gran matemática y astrónoma, que tuvo una muerte atroz a manos de fanáticos cristianos.
Entre ellos se encontraban personajes tan conocidos como Arquímedes, el más notable científico y matemático de la antigüedad; Euclides que desarrolló allí su Geometría; Hiparco de Nicea, que explicó a todos la trigonometría‏‎, y defendió la visión geocéntrica del universo; Aristarco, que defendió todo lo contrario, es decir, el sistema heliocéntrico siglos antes de Copérnico; Eratóstenes, que escribió una geografía y compuso un mapa bastante exacto del mundo conocido; [[Herófilo de Calcedonia]], un fisiólogo que llegó a la conclusión de que la inteligencia no está en el corazón sino en el cerebro; los astrónomos Timócaris y Aristilo; [[Apolonio de Pérgamo]], gran matemático, que escribió en Alejandría ''Sobre las secciones cónicas'' ;[[Apolonio de Rodas]], autor de ''El viaje de los argonautas''; [[Herón de Alejandría]], un inventor de cajas de engranajes y también de unos aparatos movidos por vapor: es el autor de la obra ''Autómata'', la primera obra conocida sobre robots; el astrónomo y geógrafo Claudio Ptolomeo; Galeno, quien escribió bastantes obras sobre el arte de la curación y sobre anatomía. La última persona insigne del Museo fue una mujer, [[Hipatia de Alejandría]], gran matemática y astrónoma, que tuvo una muerte atroz a manos de fanáticos cristianos.


=== Testimonios ===
=== Testimonios ===
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=== Supervivencia de la Biblioteca ===
=== Supervivencia de la Biblioteca ===
[[Archivo:Alexandria Library Inscription.jpg|thumb|right|300px|Inscripicón de Tiberio Claudio Balbilo, confirmando la existencia de la Biblioteca en el siglo I, tal como afirman las fuentes clásicas.]]
[[Archivo:Alexandria Library Inscription.jpg|thumb|right|300px|Inscripicón de Tiberio Claudio Balbilo, confirmando la existencia de la Biblioteca en el siglo I, tal como afirman las fuentes clásicas.]]
Después del desastroso incendio, la muerte de César y del ascenso de Augusto, Cleopatra VII se refugió en la ciudad de [[Tarsos|Tarso]] (en la actual [[Turquía]]) junto con Marco Antonio. Fue entonces cuando el triunvito le ofreció los 200.000 manuscritos traídos desde la [[biblioteca de Pérgamo]] (en Asia Menor), que Cleopatra depositó en la biblioteca como compensación por cualquier posible pérdida.  
Después del desastroso incendio, la muerte de César y del ascenso de Augusto, Cleopatra VII se refugió en la ciudad de Tarso (en la actual [[Turquía]]) junto con Marco Antonio. Fue entonces cuando el triunvito le ofreció los 200.000 manuscritos traídos desde la [[biblioteca de Pérgamo]] (en Asia Menor), que Cleopatra depositó en la biblioteca como compensación por cualquier posible pérdida.  


La existencia de la Biblioteca tras su supuesta destrucción queda confirmada por una inscripción hallada a principios del siglo XX, dedicada a Tiberio Claudio Balbilo (56). Como se apunta en ''Handbuch der Bibliothekswissenschaft'' (Georg Leyh, Wiesbaden 1955), Balbilus desempeñaba un cargo ''“supra Museum et ab Alexandrina bibliotheca”'' combinando la dirección del Museo y las bibliotecas como si de una academia se tratara.  
La existencia de la Biblioteca tras su supuesta destrucción queda confirmada por una inscripción hallada a principios del siglo XX, dedicada a Tiberio Claudio Balbilo (56). Como se apunta en ''Handbuch der Bibliothekswissenschaft'' (Georg Leyh, Wiesbaden 1955), Balbilus desempeñaba un cargo ''“supra Museum et ab Alexandrina bibliotheca”'' combinando la dirección del Museo y las bibliotecas como si de una academia se tratara.  
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===Los desastres de los siglos III y IV ===
===Los desastres de los siglos III y IV ===


Sin embargo, a finales del siglo II y a lo largo del Siglo III|III, una serie de desastres se abatieron sobre la antigua capital de los Ptolomeos: en primer lugar, la llamada Guerra Bucólica (172-5), que se extendió hasta Alejandría; a ésta subisguieron la rebelión de los usurpadores Avidio Casio (175) y Pescenio Níger (193-4); el brutal saco de Alejandría por capricho de Caracalla (215); la pléyade de tumultos y revueltas civiles y militares que hubo durante la Anarquía Militar a raíz de la crisis económica y la aplastante presión fiscal; los ataques de los Blemmíes… La ciudad fue destrozada por Valeriano (253); de nuevo en 269, cuando se dio la desastrosa conquista de la ciudad por Zenobia, reina de [[Palmira]]; y en el 273, cuando Aureliano, al reconquistarla para los romanos, saqueó y destruyó completamente el Bruchión, desastre al que no pudieron sobrevivir ni el Museo ni la Biblioteca. Se dice que en aquella ocasión los sabios griegos se refugiaron en el Serapeo, que nunca sufrió con tales desastres, y otros emigraron a [[Bizancio]]. Finalmente, en 297 la revuelta del usurpador [[Domicio Domiciano|Lucio Domicio Domiciano]] acabó con Alejandría tomada y saqueada por las tropas de Diocleciano, tras un asedio de ocho meses (victoria conmemorada por el llamado “Pilar de Pompeyo”). Se dice que tras la capitulación de la ciudad, Diocleciano ordenó que la carnicería continuara hasta que la sangre llegara a las rodillas de su caballo. La accidental caída de éste libró a los alejandrinos de la muerte, y para conmemorar el hecho erigieron una estatua al caballo. Diocleciano ordenó asimismo quemar millares de libros relacionados con la alquimia y las ciencias herméticas, para evitar que alguien pusiera en peligro la estabilidad monetaria que a duras penas se había conseguido restaurar.
Sin embargo, a finales del siglo II y a lo largo del Siglo III|III, una serie de desastres se abatieron sobre la antigua capital de los Ptolomeos: en primer lugar, la llamada Guerra Bucólica (172-5), que se extendió hasta Alejandría; a ésta subisguieron la rebelión de los usurpadores Avidio Casio (175) y Pescenio Níger (193-4); el brutal saco de Alejandría por capricho de Caracalla (215); la pléyade de tumultos y revueltas civiles y militares que hubo durante la Anarquía Militar a raíz de la crisis económica y la aplastante presión fiscal; los ataques de los Blemmíes… La ciudad fue destrozada por Valeriano (253); de nuevo en 269, cuando se dio la desastrosa conquista de la ciudad por Zenobia, reina de [[Palmira]]; y en el 273, cuando Aureliano, al reconquistarla para los romanos, saqueó y destruyó completamente el Bruchión, desastre al que no pudieron sobrevivir ni el Museo ni la Biblioteca. Se dice que en aquella ocasión los sabios griegos se refugiaron en el Serapeo, que nunca sufrió con tales desastres, y otros emigraron a [[Bizancio]]. Finalmente, en 297 la revuelta del usurpador Lucio Domicio Domiciano acabó con Alejandría tomada y saqueada por las tropas de Diocleciano, tras un asedio de ocho meses (victoria conmemorada por el llamado “Pilar de Pompeyo”). Se dice que tras la capitulación de la ciudad, Diocleciano ordenó que la carnicería continuara hasta que la sangre llegara a las rodillas de su caballo. La accidental caída de éste libró a los alejandrinos de la muerte, y para conmemorar el hecho erigieron una estatua al caballo. Diocleciano ordenó asimismo quemar millares de libros relacionados con la alquimia y las ciencias herméticas, para evitar que alguien pusiera en peligro la estabilidad monetaria que a duras penas se había conseguido restaurar.


En 330, con la fundación de la nueva capital imperial, [[Constantinopla]], es probable que parte del contenido del Serapeum fuera incautado por las autoridades imperiales y trasladado a la Nueva Roma.
En 330, con la fundación de la nueva capital imperial, [[Constantinopla]], es probable que parte del contenido del Serapeum fuera incautado por las autoridades imperiales y trasladado a la Nueva Roma.
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|style="text-align: right;"|(Jorge Luis Borges).<ref>En ''Obra Poética'', Emecé, Buenos Aires, 1977, pp. 507-508.</ref>
|style="text-align: right;"|(Jorge Luis Borges).<ref>En ''Obra Poética'', Emecé, Buenos Aires, 1977, pp. 507-508.</ref>
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En el siglo VI hubo en Alejandría luchas violentas entre [[Monofisismo|monofisitas]] y [[Melquitismo|melquitas]] y más tarde aún, en el 616 los persas de Cosroes II tomaron la ciudad. Alejandría seguía siendo, no obstante, una de las mayores metrópolis mediterráneas en el momento de la conquista musulmana, en 642, tras 14 meses de asedio. El historiador [[Eutiquio]] cita una carta escrita hacia el viernes de la luna nueva de Moharram del año vigésimo de la Hégira<ref>22 de diciembre de 642)</ref> donde el comandante musulmán Amr ibn al-Ass, al entrar en la ciudad, se dirigió al segundo sucesor de Mahoma, al califa Umar ibn al-Jattab e hizo un inventario de lo encontrado en la ciudad de Alejandría: ''"4.000 palacios, 4.000 baños, 12.000 mercaderes de aceite, 12.000 jardineros, 40.000 judíos y 400 teatros y lugares de esparcimiento"''.
En el siglo VI hubo en Alejandría luchas violentas entre monofisitas y melquitas y más tarde aún, en el 616 los persas de Cosroes II tomaron la ciudad. Alejandría seguía siendo, no obstante, una de las mayores metrópolis mediterráneas en el momento de la conquista musulmana, en 642, tras 14 meses de asedio. El historiador [[Eutiquio]] cita una carta escrita hacia el viernes de la luna nueva de Moharram del año vigésimo de la Hégira<ref>22 de diciembre de 642)</ref> donde el comandante musulmán Amr ibn al-Ass, al entrar en la ciudad, se dirigió al segundo sucesor de Mahoma, al califa Umar ibn al-Jattab e hizo un inventario de lo encontrado en la ciudad de Alejandría: ''"4.000 palacios, 4.000 baños, 12.000 mercaderes de aceite, 12.000 jardineros, 40.000 judíos y 400 teatros y lugares de esparcimiento"''.


El cronista y pensador atristotélico Ibn al-Kifti, afirmó en sus páginas que Amr se entrevistó con el comentarista aristotélico Juan Filópono, quien le pidió tomar una decisión sobre el futuro de los libros de la Biblioteca debido a que las actividades de este lugar estaban momentáneamente suspendidas. Amr no se atrevió a responder, y prefirió enviar otra misiva al califa, pidiendo instrucciones. La epístola tardó más de treinta días en llegar a las manos del polémico Omar, quien estaba ocupado para ese entonces en sus conquistas y en la redacción escrita del Corán. Pasados treinta días más, Amr recibió la respuesta través de un mensajero y leyó, no sin pesadumbre, a Filópono la decisión de Omar:  
El cronista y pensador atristotélico Ibn al-Kifti, afirmó en sus páginas que Amr se entrevistó con el comentarista aristotélico Juan Filópono, quien le pidió tomar una decisión sobre el futuro de los libros de la Biblioteca debido a que las actividades de este lugar estaban momentáneamente suspendidas. Amr no se atrevió a responder, y prefirió enviar otra misiva al califa, pidiendo instrucciones. La epístola tardó más de treinta días en llegar a las manos del polémico Omar, quien estaba ocupado para ese entonces en sus conquistas y en la redacción escrita del Corán. Pasados treinta días más, Amr recibió la respuesta través de un mensajero y leyó, no sin pesadumbre, a Filópono la decisión de Omar:  
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