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Casa Navarro Rubio
Esta vivienda, proyectada por los arquitectos valencianos Fernando M. García-Ordóñez y Juan María Dexeus Beatty (fundadores del estudio GO-DB) en 1960, se localiza en un entorno accidentado y rocoso del municipio costero de Jávea (Provincia de Alicante, España).
En la parcela, situada junto al mar y con unas dimensiones de 20 metros de profundidad por 200 de longitud, se aprecian grandes fosas artificiales y naturales producidas por la explotación de las canteras de piedra tosca.
El planteamiento de partida, expuesto en la memoria del proyecto, supone un gran aprecio por el lugar. La buena percepción del paisaje, y el logro de una arquitectura transparente y flexible se convertían en una premisa. Entre otros requerimientos por parte del cliente se menciona expresamente el de evitar la utilización de toldos que se conservan mal en un ambiente costero, la posibilidad de tener vistas hacia la bahía y hacia las montañas del interior, el contar con un jardín íntimo que no estuviese orientado hacia el mar.
El volumen edificado consistirá finalmente en una caja perfectamente definida, escueta y muy nítida; se trata de un prisma rectangular que sobresale en voladizo de su apoyo en la planta baja.
La planta baja es diáfana y permeable. Se plantea un doble acceso para peatones y coches, los dos de espaldas al mar. El paso para personas constituye un eje importante que recorre toda la parcela y la edificación en su sentido tranversal. Se inicia en el acceso desde la calle, pasa por la puerta principal y cruzando por en medio la vivienda llega a alcanzar la panorámica marina. Se intercalan en esta planta los espacios construidos y ajardinados o terrazas con distintas orientaciones.
El programa debía contar con las necesidades de una familia numerosa y se opta por una moderna y clarificadora separación de zonas; zona de noche y diurna. En la planta baja, que es "zona de día", se sitúan el jardín de entrada, el estar comedor, la cocina y el oficio. Formando en esta misma planta un área aparte, al otro lado del eje transversal antes descrito, se distribuyen un dormitorio de servicio, terraza, duchas y garaje. En primera planta se localiza la "zona de noche" con una batería de dormitorios con literas, terraza superior y dos servicios.
La edificación se resuelve con estructura de hormigón armado. En el primer piso que alberga los dormitorios se distingue con nitidez la caja contenedora definida por los forjados y un testero de hormigón, y los cerramientos ligeramente retranqueados, que son paramentos de ladrillo.
En el primer piso los dormitorios cuentan con estrechos huecos que se orientan hacia levante. Los huecos se protegen con un sistema de amplias correderas mallorquinas, bien integradas en la fachada y que van de forjado a forjado. En planta baja el estar-comedor se vuelca, muy transparente, hacia el mar.
Nos llama la atención en este proyecto la estrecha relación conseguida entre el interior y el exterior. El tratamiento acristalado del cerramiento en los espacios más nobles o en el acceso, permiten incorporar visualmente el paisaje en el interior y los elementos de transición, como el porche- terraza, prolongan físicamente la vivienda al exterior.
El rigor y la claridad de las plantas, funcionales hasta el esquematismo, se hacen hábilmente compatibles con la riqueza visual y espacial, en una arquitectura que se muestra, a la vez, integrada en el paisaje y concebida desde la más pura racionalidad.
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Referencias
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